Será cometido del Diputado de Cultos cuidar de la espiritualidad cristiana en el seno de la Hermandad, organizando, en acuerdo con el Director Espiritual, todos los cultos que hayan de celebrarse, ocupándose de la designación de los predicadores.
Fomentará la participación de los Hermanos en los diferentes cultos y velará porque sean verdaderas asambleas de oración en la fe y en la caridad.
Atenderá y facilitará la formación cristiana de los Hermanos en todos sus aspectos, programando ciclos formativos, si así lo estimase oportuno, conforme a las necesidades y orientaciones de la Iglesia.
Vigilará y supervisará el cumplimiento de las normas litúrgicas y pastorales de la Iglesia, con sencillez y dignidad en el ornato y organización de los cultos, velando y garantizando la dimensión litúrgica y espiritual de la Hermandad en la Estación de Penitencia.
